miércoles, enero 31

Las grandes ironías

Los Mochis, Sin.- La caricatura de El Debate de hoy muestra a un diputado ricachón con un anillo de diamantes demandando desde la tribuna del Congreso la reducción de los salarios de los lesgisladores.

Alfredo, Elsa y yo nos vemos en las mismas. Somos periodistas y nuestra labor incluye el tema del incremento salarial a los obreros.
Con un sesgo sorpresivo nos percatamos al vernos tan pobres como aquellos por quienes abogamos.
Los periodistas tenemos acceso a los lugares más lujosos, comemos con señores y señoras importantes, nos transportamos en aviones supersónicos y en camionetas del año; festejamos en palacios y mansiones los homenajes a los héroes de la patria.
Sin embargo, el mundo de fantasía se desvance al entrar a nuestros humildes hogares, donde no ha habido dinero para resanar las paredes. Dentro de la cómoda están las cuentas por pagar y en la bolsa los tres pesos que habrá que estirar para evitar ahogarnos en el oleaje salvaje de las deudas.

Un periodista calificado gana entre tres y cuatro mil pesos mensuales, sueldo similar al de una trabajadora doméstica en esta región.

Así que mientras los diputados ven cómo se bajan los salarios, los periodistas tendremos que ver cómo nos lo subimos. O, no?

Un abrazo solidario a los obreros de la tecla.



3 comentarios:

Anónimo dijo...

Me uno al abrazo solidario

Anónimo dijo...

Hola Ave:

Hay varios, muchos, sectores de trabajadores que tienen ingresos bajos, escasos, lo que no les permite dar a sus familias una vida digna.

Por ello la importancia de un cambio del modelo económico que vivimos. Que el trabajo se remunere a lo que realmente cuesta.

Te sigo leyendo.

Coro dijo...

Hola Martha,
espero que suban los sueldos, no solamente de los periodistas!!!

Saludos, abrazos y besos.